Aprender a administrarse también es cosa de mujeres; te presentamos algunas características en el manejo de las finanzas desde la perspectiva femenina.
Y es que no por nada se considera que el género femenino trae en la venas una parte de contadoras. Sin ser profesionales, en la mayoría de los hogares mexicanos la mujer es la cabeza, no sólo para la toma de decisiones, también en el manejo de los recursos.
Características de las mujeres en el hogar aplicables al manejo de las finanzas
1. Visión a largo plazo: una de las principales fortalezas de las mujeres como administradoras es su visión a largo plazo. ¿Alguna vez has escuchado que a una mujer no se le olvida nada? En este caso es algo bueno, pues su horizonte de planeación es muy largo.
Esta capacidad ayuda a lograr los objetivos que se imponen las familias, como tener una casa propia. Incluso si se quiere desarrollar una idea emprendedora, esta facultad de las mujeres hace que estos sueños se vuelvan realidad.
Para algunas mujeres que han logrado el éxito en la administración de grandes empresas, llevar esas ideas de manejo de un negocio es similar a llevar las finanzas en familia. El primer eslabón siempre será la planeación, y por lo tanto, el presupuesto.
2. Tener el control: si no sabes cuánto gasta tu empresa en sueldos, luz y en gasto corriente en general, no podrás tener la capacidad de reducir esos gastos. En la casa es similar. Si no sabes cuánto cuesta el jitomate y la cebolla, no tendrás la capacidad de darte cuenta en qué momento subió su precio y tomar medidas para que ello no afecte tu presupuesto.
Por ello es básico estar al pendiente de estos detalles para establecer planes alternos que permitan apegarte a tu presupuesto y que los altos costos no representen gastos mayores; no te puedes dar ese lujo.
3. Desviste a un santo para vestir al otro: la mayoría de los hombres piensan que las mujeres son gastalonas, sin embargo, tienen la capacidad de entender que hay dinero intocable, como el de la universidad de los hijos o el fondo de emergencia.
Su capacidad de previsión es tal, que siempre tienen un guardadito, por ello, logran salir avantes cuando se presenta algún tipo de emergencia. Nuevamente aparece su sexto sentido, ese que les permite estirar y estirar el dinero para administrarlo bien y que además sobre para ahorrar.
4. Fijarse en los detalles: su capacidad para controlar cualquier detalle, también le funciona al momento de ser la administradora del hogar, ello le permite estar en todo a la vez, sin olvidar ningún detalle.
Esta capacidad es muy importante al momento de iniciar un negocio, pues si bien la emprendedora debe rodearse de gente que le resuelva los problemas en cada una de las áreas de su firma, también debe ser una especie de todóloga que pueda tener una noción de cada una de ellas.
5. No me des problemas dame la solución: las mujeres, aunque a simple vista no se vea, están constantemente pensando en la solución para las situaciones que se les presente. En cualquier momento pueden dar un brinco y conocer la respuesta a un problema.
Al igual que en las empresas los jefes no quieren saber el qué sino el cómo se resolverá, las mujeres tienen la capacidad de dar respuesta a esos problemas que aquejan los hogares.