Nuestros ingresos no siempre son suficientes para financiar metas, conoce qué tipos de préstamos personales existen y hazlos tus aliados.
El crédito es una forma de lograr nuestros objetivos, pero asumiendo la responsabilidad de pagar en cierto plazo. Por esta razón debes siempre tener en cuenta tu capacidad de pago y si podrás cumplir.
El crédito te permite acceder de forma más inmediata a algo que de otra manera te llevaría años, por ello es importante pensar en utilizarlo de forma inteligente. Generalmente se recomienda para bienes de uso duradero.
Aquí algunos de los que existen en el mercado:
Crédito comercial: Este tipo de financiamiento es el que se ofrece a compañías y que son utilizados por éstas para satisfacer necesidades tanto financieras, de adquisición de bienes, pago de servicios para continuar operando, o para pagar o refinanciar los pasivos que se tienen con otras instituciones o proveedores.
En algunas ocasiones, la empresas los utilizan para hacer crecer su negocio, como decíamos una líneas atrás, es un aliado muy importante, no sólo para quien lo contrata, también para la economía en general, ya que se vuelve un círculo virtuoso al generar empleos.
Crédito hipotecario: Algunos especialistas consideran a éste la mejor deuda que alguien puede adquirir, la razón es que es la forma de generar patrimonio. Las familias mexicanas ven en la vivienda una de las más anheladas metas, tener su espacio, no pagar renta, saber que se tiene algo propio, representa un objetivo por el que trabajan, uno de los pocos que sí ven a largo plazo, porque pensar en el futuro no es una visión común de las personas.
Este crédito tiene varios plazos, pero la mayoría son a largo plazo, es decir, 10, 15 o 20 años. Hoy ya hay más facilidades y, tanto en el sector público como en el privado, se busca que las familias puedan acceder, incluso, sin tener prestaciones, a una vivienda digna.
Crédito al consumo: Los recursos de este tipo de préstamo se destinan a la adquisición de bienes o servicios en plazos determinados. Hoy en día es uno de los créditos más sencillos de solicitar y obtener. Cifras del Banco de México establecen que 40 por ciento de las compras de los mexicanos se realiza gracias a esta forma de financiamiento.
Lo ofrecen desde tiendas departamentales hasta cadenas comerciales, seguramente al estar en cualquiera de éstos dos sitios te han ofrecido este tipo de créditos, muchas veces te lo otorgan sólo con tu identificación oficial.
Créditos Personales: Este tipo de financiamiento es el más libre que hay, pues puede ser empleado de la forma en que más convenga al usuario. En este caso, la entidad financiera pone a disposición del cliente una suma de dinero, que se va a poder usar de forma totalmente libre sin tener la obligación de destinarlo a algún fin en específico. De hecho, una de las aplicaciones más comunes de este tipo de créditos es pagar otras deudas, como las que deja el uso de una tarjeta de crédito.
Es importante que recuerdes que, sea cual sea el tipo de préstamo personal que decidas solicitar, antes debes verificar que puedes pagarlo, pues podría convertirse en un enemigo y un dolor de cabeza si no sabes administrarte correctamente.