El Fondo Mutilateral de Inversiones (FOMIN) establece que el futuro de la plataforma de financiamiento colectivo depende de su regulación.
De acuerdo con el primer estudio que se realizó sobre el Crowdfunding en México, las nuevas tecnologías han dado origen a una gran cantidad de emprendimientos innovadores y oportunidades de negocio en el país. Al mismo tiempo, proveer de recursos para que estos emprendimientos puedan generarse debería ser algo nuevo e innovador.
En ese sentido las plataformas en línea, establece el estudio, son capaces de canalizar el capital a una amplia variedad de proyectos filantrópicos, actividades artísticas, innovaciones sociales, negocios y emprendimientos con tan sólo un clic.
“Este proceso, conocido como crowdfunding, se está convirtiendo en una herramienta de financiamiento eficaz que saca provecho de la fuerza colectiva de los grandes grupos y del poder de las tecnologías digitales para satisfacer los déficits en las necesidades de financiamiento”, establece el documento.
Contexto ayuda
El estudio realizado por el organismo que pertenece al Banco Interamericano de Desarrollo (BID), refiere que hoy por hoy la rápida expansión del acceso al Internet y las tecnologías relacionadas, sin descontar las condiciones económicas actuales del país, permitirán que más mexicanos participen en el crowdfunding.
Lo mismo que puede llevar al éxito las plataformas de financiamiento colectivo, son las mismas que requieren atención, y es que uno de los retos a los que se enfrenta el modelo es la creación de reglas y normativas necesarias para regular las transacciones financieras en línea, incluyendo al crowdfunding.
No es un secreto que el gobierno se ha visto rebasado para crear leyes acorde a los nuevos tiempos, a las nuevas tecnologías; por ello, su capacidad para establecer mecanismo de cumplimiento eficaces dependerá de la estabilidad política en general, de la capacidad de las instituciones nacionales y del liderazgo que tengan.
Una de las ventajas es que México tiene muchas tradiciones de acción colectiva, subraya el estudio, por lo que el concepto en sí mismo no debería de ser difícil de entender, pese a la desconfianza persistente aún en las nuevas tecnologías.
“Los esfuerzos para fomentar la confianza en el crowdfunding en línea aumentarán conforme avance la confianza en las tecnologías afines al mejorar la seguridad de los datos en línea y evitar externalidades negativas”, aclara Crowdfunding en México.
Así, entre las recomendaciones del organismo para que este modelo se desarrolle de manera sostenible, está que los esfuerzos se centren en mejorar la capacidad de los emprendedores y las pequeñas y medianas empresas (PyMES) para tener acceso al capital que necesitan para impulsar la innovación y el crecimiento económico.
Además hay un punto importante que es fomentar la confianza en el mercado, ya que se obtiene un amplio apoyo al involucrar a diversos actores y promover un mejor entendimiento de los posibles usos e impacto de los mecanismos de crowdfunding para emprendedores, negocios, donantes e inversionistas, establece el estudio.