Educación Financiera

¿Cuales son los créditos personales más baratos?

Necesitas un crédito y buscas uno con las mejores condiciones para pagar la menor cantidad de intereses. El problema: hay tantas opciones que se vuelve muy difícil identificar el mejor.

El resultado de una mala elección puede reflejarse en tus bolsillos: un crédito con una alta tasa de interés que no te permite ahorrar, o incluso un fraude al pagar anticipos.

Te vamos a dar algunos tips para identificar el crédito que más te conviene y una lista de sitios web donde puedes comparar los distintos créditos personales que hay en México.

Como saber cuales son los créditos personales más baratos

Los préstamos personales en México por lo general tienen una tasa de interés alta, esto se debe a que tienen un riesgo de impago alto, y generalmente son sin garantía, en cambio los créditos hipotecarios o automotrices tienen una tasa más baja, pues existe la posibilidad de recuperar el bien en caso de caer en mora.

Los créditos baratos son aquellos cuyo CAT es más bajo y se pagan en un corto periodo de tiempo. Entre mayor sea el plazo del crédito más intereses se pagan.

Adicionalmente puedes compara el pago mensual y multiplicarlo por el número de pagos a realizar para saber cuanto habrás pagado en total por el crédito.

Donde encontrar los mejores préstamos

Actualmente ya existen sitios en Internet dedicados a comparar los distintos tipos de créditos que existen, en ellos puedes conocer el CAT, el pago mensual y los plazos de los créditos.

Para utilizarlos sólo debes ingresar al sitio y elegir el monto que necesitas, para que automáticamente veas cuales opciones son las más convenientes para ti con base en el monto que necesitas.

Puedes visitar los siguientes sitios:

Finanzas personales

Cuál crédito te conviene para este regreso a clases

Ya viene el regreso a clases y con ello una serie de gastos que nos pueden meter en serios problemas. Se deben comprar útiles escolares, uniformes, artículos de papelería y se deben pagar las colegiaturas. Todo esto hace que nuestro bolsillo se desinfle un poco y tengamos que buscar otras opciones para encontrar una solución a nuestra economía. Aquí te damos recomendaciones de cuál crédito te conviene para este regreso a clases, que ayude a tu economía y no haga que te descapitalices en el futuro.

Buscar créditos es una de las opciones más viables, rápidas y efectivas que existen. Pero ten cuidado con la que eliges. Te recomendamos que analices bien qué cantidad necesitas y por cuánto tiempo tendrás que pagar el crédito. La Ley para la Transparencia y el Ordenamiento de los Servicios Financieros (LTOSF) te ayuda a que los créditos que contrates sean los más claros posibles, pues obliga a quienes otorgan crédito a publicar el CAT (Costo Anual Total) y publicar las tasas de interés en términos anuales. Asimismo, no deben cobrar intereses por anticipado, también deben publicar el registro de comisiones y contratos en el Banco de México y en la CONDUSEF respectivamente, y deben respetar que si el vencimiento de algún pago es en un día inhábil bancario, éste debe aceptarse al día siguiente sin penalidad. Cuando pidas un crédito revisa que se cumpla lo anterior.

Por otro lado, existen opciones alternativas para el fondeo de crédito que no requieren de largos trámites, y que permiten que prestamistas transfieran fondos a una cuenta donde personas que necesitan dinero solicitan préstamos, logrando un trato casi directo entre prestamista y solicitante, a tasas muy bajas, con eficacia y rapidez.

Cómo obtener un crédito

Por lo general, la forma más rápida de obtener un crédito es utilizando las tarjetas de crédito. Sí, suena redundante pero es la forma de pago que te soluciona el problema rápidamente. Utilizar tarjetas de crédito no es malo, si haces bien tus cuentas y no te endeudas más de lo que puedes pagar cada mes, y si no te embarcas en un crédito donde el interés es altísimo. En México, los intereses de las tarjetas pueden variar, desde el 12% al 99%. Es altamente recomendable que verifiques bien cuál es la tasa de interés de la tarjeta que planeas usar. Chécalo con el Costo Anual Total (CAT) y elige el CAT más bajo. De acuerdo al Reglamento de la Ley Federal de Protección al Consumidor, en el Artículo 6, se establece que todas las instituciones financieras deben publicar el porcentaje del CAT. El CAT, en dicho Artículo, se define como: “El Costo Anual Total es el costo de financiamiento que para fines informativos y de comparación, incorpora la totalidad de los costos y gastos del crédito. El referido Costo Anual Total se calculará utilizando la metodología establecida por el Banco de México para el tipo de crédito de que se trate, vigente en la fecha del cálculo respectivo.” Revisa bien el CAT. No pagues más de lo que debes pagar. Otra opción que te ofrecen las tarjetas de crédito es la compra de artículos a meses sin intereses. En este regreso a clases, aprovéchala, pero sin abusar. A veces esto conlleva a una fuga de capital importante.

Otra forma de crédito es pedir préstamos personales o de nómina en la empresa donde trabajas. Haz bien tus cuentas, revisa tu presupuesto mensual y a partir de ahí decide qué cantidad te pueden prestar. Revisa cuáles son las condiciones para el préstamo y la tasa de interés. Por lo general, cada mes o quincena, te descuentan una cierta cantidad para ir pagando la deuda. Toma el crédito pero no te descapitalices.

Los bancos también ofrecen préstamos. Te piden una serie de requisitos para obtener el crédito y esto conlleva tiempo. Planea desde antes pedir el préstamo, para que no te ganen las carreras. Revisa los diferentes préstamos que hace cada institución bancaria y elige la que más te convenga. Todo se resume al interés más bajo, a las facilidades de pago y al tiempo que debes pagarlo.

Otra opción muy viable es la de un fondo colectivo o crowdfunding. En él, un grupo de personas prestamistas se juntan para prestar dinero a personas que piden el préstamo, a intereses muy bajos y justos. Ésta es una excelente opción para obtener un crédito.

Elegir el crédito más conveniente para este regreso a clases requiere de tu total atención y análisis. Analiza tu presupuesto, revisa cuál es la cantidad de dinero que necesitas y con base en esto elige lo más adecuado para tus necesidades. No dejes que el regreso a clases te descapitalice.

Préstamos en línea

Precauciones al solicitar préstamos personales inmediatos online

Las ofertas de préstamos que se anuncian bajo las primicias “fáciles y rápidos” son difíciles de resistir. Sin embargo, debes tomar precauciones al solicitar préstamos personales inmediatos online.

Cuando una situación económica apremia es difícil pensar con claridad y muy fácil caer en las redes de estafadores que se aprovechan de ello.

Ya sabes lo que dicen, “no todo lo que brilla es oro” y no hay nada más cierto que esta premisa de la cultura popular en nuestro país. Para empezar, deberías dudar cuando encuentres estas dos palabras juntas.

Según cifras de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), muchos de estas empresas te hacen esa promesa porque no revisan tu historial de crédito, ni tus ingresos y además te ofrecen intereses bajos y pagos fijos.

El organismo establece que este tipo de empresas son conocidas como gestoras de créditos y como no están constituidas como instituciones financieras, no puede atender reclamaciones de ningún tipo por incumplimiento, porque no están dentro de su área de competencia.

Este tipo de empresas operan generalmente con adelantos por concepto de comisión de apertura, en la mayoría de las ocasiones, éstas pueden ascender a 6 por ciento del monto autorizado de préstamo.

Una vez que el solicitante hace el depósito de esta cantidad, la empresa alega que el crédito está en proceso de autorización y ¡nunca le depositan!

Por ello, la Condusef te recomienda:

  • Cerciorarte de la identidad y registro de la empresa ante Condusef. Siempre será más seguro acudir directamente con instituciones debidamente autorizadas.
  • No te dejes engañar por la aparente rapidez para el otorgamiento del crédito.
  • No entregues datos de tus tarjetas de crédito o débito si te son requeridos.
  • Si optas por este tipo de servicios, es recomendable que en ningún caso pagues comisiones por gastos de gestoría, o de otro tipo antes de recibir el dinero del crédito.
  • Recuerda que también es deseable que hagas una comparación entre diferentes instituciones, considera la tasa de interés que te cobrarán y el Costo Anual Total (CAT).
  • Pregunta si existe algún otro tipo de comisión por la que debes pagar, además de las que te mencionen.
  • Intenta pagar el préstamo lo antes que te sea posible.

Es importante que tomes el mayor número de precauciones posibles. Aunque necesites un préstamo urgentemente, siempre será preferible que tomes las precauciones necesarias para evitar caer en un fraude.

Préstamos en línea

No comparar puede salirte caro

Al solicitar un crédito, confrontar las condiciones entre varias instituciones es fundamental para no terminar pagando de más. No comparar puede salirte caro.

Supongamos que tienes una deuda de 20 mil pesos en tu tarjeta de crédito y quieres saber qué te conviene más: si pagar sólo el mínimo de esa deuda o pedir un préstamo en Prestadero para pagar la deuda de tu tarjeta. ¿Qué te conviene más? Aquí te desarrollamos los dos escenarios.

De acuerdo con la calculadora de pagos mínimos de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), si tuvieras una tarjeta de crédito en la que debes 20 mil pesos y sólo pagaras cada mes el mínimo solicitado por el banco, tardarías aproximadamente ¡20 años! en pagar la totalidad de la deuda.

Los supuestos bajo los cuales fue realizado este ejemplo fueron:

  • Límite de crédito de 25 mil pesos.

  • Tasa de interés de 28.90 por ciento.

  • Comisión anual de 600 pesos.

Según la herramienta de la Condusef, realizarías más de 240 pagos mensuales y ¡pagarías 1423.5 veces lo que debes! Además, todavía tendrías un saldo por liquidar de 3,542.70 pesos.

El cálculo establece que pagarías comisiones por 13,224 pesos e intereses por 16, 179.96, con un Impuesto al Valor Agregado (IVA) de 2,588.79 pesos.

Ahora veamos cómo sería en Prestadero si pidieras un préstamo de 20 mil pesos para pagar la deuda de tu tarjeta de crédito. En Prestadero se ofrece una tasa preferencial que va de 8.9 a 28.9 por ciento.

Según la calculadora que está en el portal de la plataforma, si el plazo elegido para pagar el crédito es de 24 meses, con una tasa de interés de 8.9 por ciento, esto es lo que pagarías:

  • Mensualmente: 925.86 pesos

  • Comisión por apertura: 696 pesos

  • Debido a que la comisión se descuenta del monto solicitado, se te depositaría un monto neto de 19,304 pesos

  • Y pagarías un total de 22, 220.53 pesos

  • Por lo que el total de intereses que pagarías sería de 2,220.53 pesos

El Costo Total Anual (CAT) de 12.63 por ciento. Es importante que recuerdes que el CAT es el costo total de financiamiento, como su nombre lo indica, es decir, aquí se incluyen todo lo que implica el crédito, no sólo la tasa que te cobran.

Este ejercicio es para demostrarte que siempre debes comparar, no importa si el préstamo es por internet o físico, para que no termines pagando de más.

Financiamiento

Aspectos a considerar para tu primera tarjeta de crédito

¿Te da miedo echarte tú mismo la soga al cuello? Te decimos qué aspectos debes considerar para la primera tarjeta de crédito y su uso responsable.

Como en todo tipo de financiamiento, sea un préstamo personal, automotriz, hipoteca o las propias tarjetas de crédito, es indispensable usarlo con una planeación previa, no sólo gastar por gastar, pues de lo contrario te puedes meter en serios problemas de los que te costará mucho trabajo salir.

Por eso, te compartimos las recomendaciones de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) para que desde un principio hagas uso responsable del plástico y evites problemas de sobreendeudamiento.

– Tus ingresos. Aún cuando te ofrezcan una alta línea de crédito, utiliza sólo lo que puedas pagar. Es primordial que analices cuál es tu capacidad real de pago y que desde el principio te quede claro que una tarjeta de crédito es un medio de pago, no una extensión de tu dinero.

– Patrón de pago. De acuerdo a qué tan puntual serás con tus pagos es el tipo de tarjeta de crédito que debes considerar. Si por ejemplo, serás parte del 40 por ciento de los usuarios que son “totaleros”, es decir que pagan su adeudo completo en la fecha de pago y no generan intereses, te conviene poner atención a la cuota anual.

Si no vas a ser “totalero”, debes fijarte más en la tasa de interés.

– No dejes de pagar las deudas adquiridas. Entre más tiempo dejes pasar tus deudas, los intereses crecerán hasta el punto en el que terminarás pagando más dinero por los intereses que por el producto que compraste.

– Antes de elegir, compara el Costo Anual Total (CAT). Recuerda que es esa cifra que te permite comparar si es más económica con una u otra institución dependiendo de los costos asociados al plástico como comisiones, anualidad e intereses, entre otros.

– Hábitos de compras. Si vas a usar tu plástico sólo en caso de emergencia o para aprovechar promociones de meses sin intereses de vez en cuando, elige una tarjeta que te ofrezca una anualidad muy baja. Aunque en este caso también debes verificar que no te

cobre una comisión por no usarla frecuentemente.

Si por el contrario, vas a usar esta tarjeta en tu vida cotidiana, debes comparar las comisiones y los costos aplicados a las operaciones, como la disposición en efectivo.

En este enlance de la Condusef http://e-portalif.condusef.gob.mx/micrositio/index.php encontrarás un simulador donde puedes comparar diversas tarjetas de cŕedito de distintas instituciones bancarias para que elijas la tarjeta que se adecúa más a tus necesidades y hábitos de consumo.

Recuerda que las tarjetas de crédito son una gran responsabilidad, pues pueden afectar tu historial crediticio y después te será más difícil acceder a un financiamiento para un carro o una casa, por ejemplo. Así que sigue estos consejos y haz un buen uso de este medio de pago para que nunca tengas problemas.

Educación Financiera

Glosario de términos financieros I

Si crees que necesitas un glosario de términos financieros que te ayude a entender los conceptos más básicos, hemos preparado esto para ti.

A veces creemos que la educación financiera es algo complicado, pero todos los días manejamos términos o escuchamos conceptos que se involucran en nuestra vida cotidiana sobre los cuales necesitamos saber. De ahí que te dejamos los términos más utilizados con su respectivo significado para no quedarte con cara de “what?” en la siguiente plática con tus amigos.

Glosario Financiero I

1. Activo total: todo aquello que tenga un valor y te pertenezca eso será tu activo. Por ejemplo, tu casa o tu auto y que en caso de emergencia, puedas vender, empeñar o hipotecar para salir de deudas.

2. Afore: Administradoras de Fondos para el Retiro (Afore). Son aquellas empresas dedicadas a administrar y hacer crecer las aportaciones que realizas a tu fondo de ahorro para el retiro. Son reguladas por la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar) y es tu deber y obligación saber en cuál se encuentran tus recursos para que te mantengas al tanto de su desempeño.

3. Agente: (de seguros, inmobiliario, de bienes raíces) Son aquellas personas dedicadas a brindarte asesoría para llevar a cabo una operación. Por ejemplo, el agente de seguros te ayudará en la adquisición de este producto y su reclamación en caso de ser necesario, mientras que el agente inmobiliario puede apoyarte en la compra o adquisición de tu casa.

4. Banca comercial: Son las instituciones financieras que comúnmente conocemos como bancos en donde realizan operaciones de ahorro y crédito, principalmente.

5. CAT: (Costo Anual Total) Es una sola cifra que engloba todos los costos asociados a tu crédito como comisiones, seguros, anualidad y gasto por apertura. Esto permite comparar cuánto te cuesta un financiamiento con diferentes entidades.

Esta cifra se calcula, de acuerdo con el Banco de México, con base en los flujos de recursos entre el cliente y la institución que otorga el cliente.

6. Cuenta: Registro en alguna institución financiera que te corresponde únicamente a ti. Por ejemplo, la cuenta de banco o la cuenta de Afore. Dado que tú eres el titular, es necesario que tengas siempre tus datos actualizados para recibir información sobre ellas.

7. Déficit fiscal: Cuando se dice que el déficit de una economía es de cierta cantidad, se refiere a que tiene mayores gastos que ingresos. Lo mismo aplica para tu economía familiar. Si te has quedado sin un peso antes de que termine la quincena, estás en déficit.

8. Deudas: Compromisos adquiridos para pagar en un plazo futuro. Te endeudas, por ejemplo, para pagar un auto y por los siguientes 36 meses realizarás un pago que acordaste con la institución para cubrir el adeudo.

9. Egresos: Todos los pagos que tienes que realizar para el funcionamiento en términos operativos de tu casa o el tuyo. Por ejemplo, el pago de agua, gas, renta, la gasolina. Todos esos gastos son compensados con los ingresos, es decir, el dinero que ganas.

10. Evasión fiscal: Se le llama así a la acción cometida de manera consciente o inconsciente con el fin de no cumplir con el pago de las obligaciones fiscales o el pago de impuestos ante la autoridad correspondiente.

Educación Financiera

Tips sobre cómo pagar mis deudas

Preguntarte cómo pagar tus deudas es parte de tu educación financiera; estos consejos te serán de suma utilidad para alcanzar un nivel de finanzas sanas.

Lo que pasa en muchas ocasiones con las deudas, es que las personas contratan crédito por encima de lo que pueden pagar, de tal modo que mes a mes encuentran dificultades para cubrir el adeudo en su totalidad hasta que un día pagan sólo una parte. A partir de ese momento aparecen otros gastos como los intereses moratorios o penalizaciones por pagos tardíos que hacen más difícil pagar la deuda por completo, hasta que un día la deuda se deja de pagar.

Otro caso que se presenta con las deudas es que las personas contratan muchas deudas. Es decir, tienen varias tarjetas de crédito, crédito hipotecario, de nómina, de auto y encima le deben al amigo, en la empresa en la que trabajan y prácticamente viven para pagar deudas. Obviamente esto termina convirtiéndose en un problema porque la persona deja de pagar primero un crédito y luego dos, hasta que termina metido en un verdadero lío.

Sin embargo no todo está perdido, así que te damos algunos tips sobre lo que puedes hacer para enfrentar esta terrible situación.

1. Haz cuentas. Analiza tú mismo a cuánto ascienden tus deudas y cuáles son las más costosas. ¡Cuidado con esas que te cobran un Costo Anual Total (CAT) de hasta 80 o 90 por ciento, porque si estás dejando de pagar, es posible que al final tengas que cubrir más de intereses que de lo que realmente utilizaste de crédito.

2. No te escondas. Es importante que enfrentes tu situación ante las áreas de cobranza o despachos legales que te busquen para saber qué está pasando con el crédito que has dejado pagar. En la mayoría de los casos te ofrecen alternativas o descuentos para cubrir tu adeudo. Llega a un acuerdo con ellos para evitar que tu deuda siga creciendo.

3. Consolida deudas. Si no tienes ahorrado pero peligrosamente estás viendo cómo tus deudas están creciendo, solicita un préstamo. Después de haber negociado con la institución sobre tu crédito automotriz, con el banco tu crédito hipotecario o con la tienda departamental sobre tu tarjeta de crédito, puedes solicitar un nuevo crédito que te permita cumplir con los compromisos que has adquirido.

4. Paga. Lo más importante es disciplinarte como lo comentábamos al inicio, porque si te comprometes a hacer los pagos que ya acordaste con los intermediarios financieros y a pagar el nuevo crédito, seguramente saldrás de deudas, lo que obviamente implicará que reduzcas tus gastos en casa, que evites caer en compras innecesarias, que te limites a gastar lo indispensable para poder pagar el nuevo crédito y así pagar este nuevo préstamo.