Cómo Administrar mi Dinero

Por qué se devalúa mi dinero si lo guardo bajo el colchón

Si a fin de mes o de la quincena lograste guardar o apartar algo de dinero, felicidades. Ya hiciste el trabajo más difícil. Ahora piensa en hacer que realmente valga la pena ese esfuerzo y sacrificio, ya que si pones “a trabajar” tus ahorros puedes obtener un poco más, en vez de sólo guardarlos en casa.

Pese a sus inconvenientes, el método de ahorro informal es el más usado por los mexicanos: casi la mitad, 43 de cada 100, guarda su dinero en casa, bajo el colchón, en tandas o con sus familiares, según datos de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).

¿Por qué no conviene ahorrar “bajo el colchón”?

El principal riesgo de “ahorrar” de esta manera es que el dinero no se capitaliza, es decir, se estanca sin generar algún interés que se traduzca en una pequeña ganancia para las personas. Según el banco y el mecanismo de inversión que la persona elija, un ahorro de 10 mil pesos podría ser de hasta 12,500 pesos al cabo de 5 años, explica Condusef.

La lógica es la siguiente: al poner tu dinero en el banco, estás “confiándoles” recursos reales e inmediatos que a su vez, estas instituciones dispondrán para invertir o prestar, y por los cuales obtendrán rendimientos que deberán devolverte con ganancias proporcionales. La ventaja de este ejercicio es que, aunque exista riesgo en las inversiones, las instituciones bancarias están obligadas a respaldar siempre la integridad de tu ahorro.

Por otro lado, el dinero estancado se devalúa. Recuerda que la “inflación” es el aumento del precio de bienes y servicios durante un periodo determinado. Inflación es lo que hace que el kilo de tortillas que hace 5 años costaba $6.50, y hoy cueste $12.50. ¡Mira aquí una gráfica de la inflación explicada con tortillas!

Como ves, disminuye el valor del dinero, por una misma cantidad de pesos no compramos lo mismo hoy que hace cinco años. En teoría económica se dice que una inflación sana está entre el 1,5% y el 2%. Esto significa que el dinero que guardemos en casa perderá cada año, mínimo entre el 1,5% y el 2% de su valor así, ¡sólo por estar guardado!

Recuerda, la forma en que guardes tu dinero se traduce en el tipo de ahorro que uses, y sobre todo es la manera en que cuides tu dinero.

Otras desventajas de los ahorros informales

Existen más inconvenientes que beneficios al usar “el colchón” o cualquier método informal para guardar tu dinero, considera entre los más comunes:

  • Puedes perderlo
  • Puede maltratarse
  • Puede ser robado
  • Como hemos dicho, no genera ningún rendimiento, interés ni remuneración alguna.

Tampoco te recomendamos pedir a algún amigo o familiar que guarde el dinero que hayas logrado ahorrar, pues no tendrás ninguna garantía formal de que cuando necesites disponer de tu dinero, la persona a quien se lo dejaste podrá devolvértelo.

Curiosamente, sólo un 50 por ciento de la población mexicana utiliza algún tipo de servicio financiero, según Condusef, y la principal causa es la desconfianza de la población en las instituciones bancarias. No obstante, en temas de ahorro como hemos visto, la casa siempre será el lugar más inseguro para guardar el dinero.

¿Por qué usar el ahorro formal?

Aquí nos referimos al dinero que guardas en entidades financieras autorizadas. Cuando haces este tipo de ahorros, la entidad o banco se responsabilizan por la custodia de los fondos depositados y deben darte la posibilidad de disponer de ellos en los plazos que así acuerden ambos.

La principal ventaja de ahorrar formalmente es que, junto con elegir una opción acorde a tus necesidades, recibes beneficios reales por guardar tu dinero, tales como rendimientos e intereses. Además comenzarás a formar un buen historial crediticio si en el futuro te interesas por un financiamiento.

3 estrategias para ganar más dinero por tu ahorro

1) Comienza a cuidar tu dinero con productos bancarios llamados de “micro ahorro”, por ejemplo cajas de ahorro o cuentas corrientes sin costos de apertura ni saldo mínimo. No importa que tus depósitos a estas cuentas sean mínimos, lo realmente valioso es que comenzarás a capitalizar tus esfuerzos de ahorro y evitarás la tentación de tener el dinero en casa.

2) Invierte tu dinero en fondos a mediano o largo plazo, pues te dan más intereses que los fondos en los que puedes disponer del dinero en cualquier momento. Como recomendación, deja un poco de dinero en la cuenta corriente que puedes tomar siempre (para emergencias), y lo demás inviértelo a plazos largos (de hasta 6 meses) para que veas una mejor ganancia.

3) Una vez que logres consolidar tus ahorros, ¡piensa en diversificarlos!, esto significa ahorrar de diferentes formas, y se traduce en recibir distintos beneficios. Ejemplos de otras formas de ahorrar son los fideicomiso (por ejemplo, educativos o de retiro), o el seguro de vida.

¿Quieres saber otras formas para cuidar y crecer tu dinero? Visita nuestro blog para saber qué  consejos y acciones  alternativas de ahorro puedes considerar.

Cómo Administrar mi Dinero

Que tu dinero no pierda valor

Dónde poner a trabajar tus ahorros no es una decisión fácil. Sin embargo, lo que sí debes considerar es que tu dinero no pierda valor.

Muchas personas le tienen miedo a invertir porque consideran que hay altas probabilidades de perder su dinero y aunque no existe un riesgo cero, lo cierto que es que existen instrumentos para todos, desde los más arriesgados hasta quienes prefieren sacrificar un poco de rendimiento por más seguridad.

Algo que debes tener muy claro es que es importante que el rendimiento que te otorgue el instrumento de tu elección sea por encima de la inflación, de lo contrario perderá valor en el tiempo. Échale un vistazo a estas opciones.

Pagarés bancarios: Debido a su seguridad, ya que son un instrumento liquidable, es decir, que al término del plazo elegido o establecido tú tienes tu dinero de vuelta más un porcentaje por rendimientos, fueron muy utilizados hace unos años.

Sin embargo hoy por hoy, esa seguridad que ofrecen actúa en contra del rendimiento, ya que las ganancias que ofrecen son mínimas, ni siquiera superan la inflación. En el mercado los rendimientos que ofrecen las instituciones financieras en este instrumento no supera la tasa de 3 por ciento anual, en promedio.

Cetes. Estos instrumentos operados por el gobierno se convirtieron en la entrada de muchas personas a la inversión, ya que se puede abrir una cuenta desde 100 pesos. Sin embargo, debido al bajo crecimiento a nivel mundial, los bancos centrales decidieron reducir la tasa de referencia, para reducir las tasas de interés de los préstamos, lo que generaría que la gente consumiera, lo que al final dinamizaría la economía.

El efecto secundario de ello es que se redujeron los rendimientos para los ahorradores, hoy quien invierte en este tipo de instrumentos no le gana la batalla a la inflación, aunque para muchos especialistas tener aquí el dinero es mejor que bajo el colchón.

Prestadero: Las personas que deciden financiar a otras personas y entran al modelo de P2P, bajo el cual opera Prestadero, pueden obtener rendimientos desde 8.90 hasta 28.9 por ciento anual, menos una comisión que cobra la plataforma, ganancia que definitivamente sí sobrepasa la inflación.

Una de sus ventajas es que al ser 250 pesos la cantidad mínima a prestar, se puede diversificar entre varios créditos, lo que reduce el riesgo que adquiere un prestamista bajo esta plataforma.

Puedes retirar los fondos cada mes, conforme se realizan los pagos o prestar nuevamente a más solicitantes de crédito.

Cuando finalmente diste el salto de ahorrador a inversionista es importante que identifiques la meta para la que estás ahorrando y haciendo crecer tu dinero, además de elegir el instrumento que te ayude a lograrlo. Esto es fundamental en la forma cómo administras tu dinero.