¿No tienes idea de cómo liquidar las deudas que tanto te atormentan? Te decimos qué tienes que considerar para salir de este atolladero.Los préstamos personales se convierten en una excelente oportunidad si lo que quieres es salir de deudas y quedarte con una sola. Sin embargo, antes de tomar una decisión de este tipo, hay que considerar algunos aspectos para cumplir con tu propósito y que no por “hacer un santo, hagas un espanto”.
Las deudas se vuelven difíciles de sobrellevar si en algún momento son más grandes que tus ingresos y entonces se comienzan a convertir en una bola de nieve en donde por más que pagues no le ves el fin y se van haciendo tan grandes que un día decides ya no pagarlas.
Pero antes de tomar esta decisión que sólo irá en contra de tus finanzas y de tu historial crediticio, analiza todas las opciones que tienes para acabar con ellas. Aquí te decimos cómo.
1. Haz cuentas
Saca cuentas de cuánto es lo que debes a través de todas las deudas que has contraído hasta el día de hoy.
2. Analiza tiempos
Considera cuánto te falta para terminar de pagar tus deudas y si durante ese tiempo no hay alguna oportunidad de mejorar tus ingresos, recibir algún bono extra, el aguinaldo o cualquier otro ingreso que te permita pagar una de esas deudas y aligerar tu carga.
3. Checa costos
Verifica cuál es el crédito más costoso que tienes contratado y busca la manera de ir acabando con los créditos más costosos por el monto y la tasa que te cobran.
4. Reestructura
Si estás teniendo problemas para cumplir con el pago puntual de tus pagos, acércate a tu banco para explicarle la situación y ver opciones para reestructurar tus créditos o tener alguna alternativa en su pago. La institución siempre estará dispuesta a negociar antes de dar por perdido un crédito.
5. Congela tarjetas
Para no sentir que pagas y de todos modos tu deuda no baja, opta por congelar aquellas tarjetas que no utilices y que te están resultando muy caras. Esto te permitirá que no te siga generando intereses.
6. Consolidación de deudas
Solicita sólo un préstamo para pagar todas tus deudas. Por ejemplo, antes de que entres en problemas de morosidad por haber dejado de pagar tus préstamos y tengas un historial crediticio sano pero estás notando que tus finanzas se contraen, pide un crédito que te permita liquidarlas y así quedarte pagando uno sólo con una mejor tasa.