Préstamos en línea

Los 7 pecados en el uso del crédito

Quizá te has preguntado sobre el uso del crédito, porque crees que recurrir a él pudiera ser una de las peores decisiones. Pero no necesariamente, todo depende de cómo lo utilices. Lo mismo si se trata de los préstamos por internet, un crédito de nómina e incluso hipotecario.

Tú puedes hacer que los intermediarios se conviertan en tus aliados, por eso te compartimos los 7 pecados más frecuentes en el uso del crédito para evitarlos:

Utilizar un crédito para algo que no necesitas

Resulta que consideras una ganga esa vajilla que está a mitad de precio y con facilidad de pago a 12 mensualidades, pero resulta que jamás preparas la cena en casa; cuando tienes invitados prefieres usar desechables o planeas salidas a restaurantes. Entonces, ¿de verdad es una oferta que te conviene pagar a crédito?

“Tarjetazos”

Bendita facilidad con la que la gente paga con su tarjeta de crédito una y otra cosa. En el centro comercial compran esto, compran lo otro, pagan aquí y pagan allá. Me pregunto si con esa misma facilidad cubrirán su deuda a la fecha de pago.

El dolor de cabeza viene a la hora de pagar, porque de piquitos en piquitos se nos va nuestro dinerito, y llega el estado de cuenta con una larga lista de compras esperando su respectivo pago.

Resulta que el saldo para no generar intereses será imposible pagar y cuando sumas el crédito del carro, la hipoteca y las otras 2 tarjetas de crédito… Se convierte esto en una bola de nieve a la que no le vemos fin.

¿Qué comprar a crédito?

Compra todo aquello que puedas pagar, pero yéndonos un poquito más allá de esa respuesta, la sugerencia es que al terminar de pagar el préstamo con el que lo adquiriste, aún puedas seguir utilizándolo.

¡Jamás compres un perfume a 24 meses sin intereses, si te dura medio año!

Tener varios créditos a la vez

El problema no es tener un crédito automotriz, una tarjeta de crédito, un crédito de nómina y una hipoteca, el problema es que entre todas, tú solo te estarás echando la “soga al cuello”. Es probable que tu ingreso sirva únicamente para pagar tus deudas y no cuentes ni con la liquidez ni con la capacidad de ahorrar, o que te la vivas haciendo pagos mínimos.

 Incurrir en costos excesivos

Dejarte llevar por súper promociones es un camino para incurrir en gastos excesivos. Campañas como: dispón de 3 meses de tu sueldo en el cajero automático, compra ahora y paga el próximo año o enganches chiquitos y “chorrocientas” mensualidades pueden sonar bastante tentadores… pero, ¡cuidado! Antes de dar el sí, bien vale la pena comparar.

¡Aguas con los pagos mínimos!

Generalmente la gente que termina haciendo pagos mínimos, es la gente que no tenía el dinero para realizar esa compra a crédito. Si no analizaste la viabilidad de hacer esas compras o que comprometías en exceso tu capacidad de pago, recurrir a los pagos mínimos no es la medida más eficaz para salir de tus deudas; por el contrario, pueden hacer impagables tus deudas.

Poner en riesgo tu historial con el uso de crédito

Acceder a los créditos que otorgan las instituciones financieras y el buen manejo que les des, te ayudará a contar con un historial crediticio para que posteriormente no sólo tengas una tarjeta de crédito, sino que puedas contar con un crédito automotriz o uno hipotecario.