El crédito es un aliado ya que puedes materializar sueños, hay opciones como los préstamos personales en México, ¿son para ti? descúbrelo.
Un préstamo personal, de acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros, es aquel donde una firma te presta cierta cantidad de dinero que podrás usar libremente.
De acuerdo con el organismo hay montos desde 1,000 hasta 500,000 pesos, y los plazos para pagarlos pueden entre 2 y 96 meses, la forma de pago puede ser semanal, quincenal o mensual.
Es frecuente que este tipo de financiamiento se solicite cuando se tienen una emergencia o imprevisto, razón por la que debes siempre tener presente tu presupuesto, deberás realizar una cálculo adecuado pasar saber si puedes pagar lo que requiere la firma en el periodo pactado.
Y no lo podemos negar que ante un problema sólo nos enfocamos en resolverlo, sin entender las consecuencias de aceptar condiciones que no nos favorables, después vendrá las verdaderas consecuencias cuando no lo puedas pagar.
La Condusef recomienda que antes de tomar algún préstamo personal que se ofrezca en México deberías considerar lo siguiente:
-La urgencia con la que requieres el crédito, ello será el parámetro para determinar cuál necesitas
-Tu capacidad de pago, identifica primero que tipo de deudas ya tienes y que comprometen tus ingresos, después de realizar tu presupuesto lo que te queda libre es tu capacidad de pago. Es muy importante que no comprometas más del 30 por ciento de tus ingresos en deudas.
-Siempre compara, sí, seguramente es una urgencia, en la mayoría de los casos, pero si no realizas este paso podrías estar contratando el préstamos personal más caro, o con las peores condiciones para ti, o con la tasa de interés más alta.
-En algunas ocasiones este tipo de préstamos personales tienen gastos inherentes al crédito, como por ejemplo las comisiones por apertura, algún tipo de seguro de vida o de desempleo, por ejemplo, siempre pregunta si el que contratarás tendrá estas condiciones.
Y si crees que comparar no sirve de nada, considera que de acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros, los usuarios de este producto podrían estar pagando el doble de lo que solicitaron, por no realizar un proceso previo de comparación.
La premisa es sencilla, haz del crédito tu aliado y no tu enemigo, la mejor forma de lograrlo es siendo honesto y considerando si podrás pagarlo y que tengas la seguridad que no se volverá otro problema como del que tratas de salir.