Cómo Administrar mi Dinero

Finanzas para no financieros, manejar un fondo de emergencia

Si eres de los que cree que las finanzas para no financieros no existen y ante cualquier imprevisto corres a pedir prestado. Esto es para ti.

Los asuntos sobre cómo administrar mi dinero nos competen a todos, no es sólo de interés para los altos ejecutivos que trabajan en las bolsas de valores o en los bancos. Es un tema que concierne a todas las personas que trabajamos, cobramos un sueldo por ello y disponemos de ese dinero para cubrir nuestras necesidades.

Y en este aspecto, un tema de vital importancia es la creación de un fondo de emergencia, lo que nos ayudará a enfrentar, como su nombre lo dice, aquellas situaciones que nos toman por sorpresa y para las que necesitamos estar preparados.

Resulta que un día, sales a trabajar y al intentar encender el auto, éste no arranca y la reparación te costará 5 mil pesos. ¿Con qué pagarás ese dinero, si el día en que se presentó la falla con trabajos tenías 100 pesos en la cartera para ponerle gasolina?

Por eso, es mejor vivir del ahorro que del préstamo. Si tuvieras un fondo de emergencias, tomarías esos 5 mil pesos de ahí, no tendrías que deberle a nadie, ni quedarte sin auto más de lo necesario, ni incurrir en ningún tipo de gasto como el pago de intereses por pedir el préstamo.

 Qué se necesita para manejar un fondo de emergencia

1. Da el paso

Si ya te decidiste pero no sabes ni por dónde empezar, puedes comenzar por vender algunas cosas que no necesites para ir armando tu fondo con el dinero que juntes. Quizá esa caminadora que usas como colgador de toallas, la bicicleta que tienes años de no utilizar o el sofá cama al que nunca le has sacado provecho. Vende todas esas cosas que no estés utilizando y crea con ese primer monto tu fondo de emergencias.

2. Ahorro en cada quincena

Además, dentro de tu presupuesto mensual o quincenal, date a la tarea de asignar un monto para ahorrar en el fondo de emergencias. Por muy pequeño que sea, todo sirve y al final, poco a poco alcanzarás a tener un mayor monto. Eso sí, ¡olvídate de recurrir a él para comprarte gustos o darte un lujo! Como su nombre lo indica, es un fondo para emergencias, no para complacer tus antojos.

3. El monto

Lo ideal es que tengas en este fondo lo equivalente a 3 meses de tu sueldo con el propósito de que ante circunstancias como la pérdida de empleo o enfermedad, tengas un monto al cual recurrir mientras se estabiliza la situación.

4. Aportaciones adicionales

Puedes ir llenando ese fondo con aportaciones adicionales como el pago de bonos o compensaciones en tu trabajo, que en lugar de que corras a gastártelo, te ayuden a completar el monto necesario para cualquier emergencia.